En una investigación llevada a cabo por el Dr. Robin Monro, del Yoga Biomedical Trust de Londres, en la que estudió a más de 2.000 practicantes de yoga con finalidades terapéuticas, con edades comprendidas entre los 31 y 60 años, se constató que el 82% había logrado mejorar sus problemas de insomnio.
El éxito del yoga en el alivio del insomnio se debe, además de al trabajo muscular, orgánico y energético de cada postura, a la respiración profunda, que calma la mente, relaja el sistema nervioso y activa la glándula pineal, productora de melatonina.
Tu respiración es clave para poder relajarte, disolver tensiones y que cada postura pueda ejercer su efecto terapéutico.
Conocer este efecto del yoga, y especialmente de ciertas posturas de yoga acompañadas de una respiración adecuada, es muy útil cuando se tienen problemas para dormir. Y es que hoy día, con esta vida moderna y tecnológica que llevamos, se han acentuado las condiciones que provocan el insomnio. La luz artificial, el estrés, las pantallas, la exposición a ondas electromagnéticas y la toxicidad del entorno hacen que sea a menudo una vida desnaturalizada y desconectada de los ritmos circadianos, los cambios que se producen en nuestro cuerpo de forma natural cada 24 horas.
Secuencia de yoga contra el insomnio y el estrés
Esta secuencia de yoga dura tan solo unos 20 minutos y se compone de 6 posturas o asanas básicas. Si las practicas al atardecer, evitando la luz artificial, te ayuda a disolver tensiones musculares y mentales que hayas acumulado durante el día.
Es una secuencia que relaja el sistema nervioso, alivia el estrés y nos sintoniza con los ritmos circadianos.
Ten en cuenta que dormir un mínimo de 7,5 horas en la edad adulta con un sueño de calidad es esencial para garantizar funciones vitales: mantener la homeostasis, reparar el ADN, equilibrar el sistema hormonal, evitar la inflamación, desintoxicar el cuerpo, regenerarse y recuperar la energía para el día siguiente. Un ejemplo fisiológico es el aumento de la actividad del hígado durante el pico de secreción de melatonina, la hormona del sueño. Cuanto más dormimos, más capacidad de desintoxicarnos, rejuvenecernos y repararnos. Por ello, quienes duermen más se conservan más jóvenes y sanos.
Para aprovechar bien la secuencia y disfrutar de un sueño reparador por la noche, lo mejor es practicarla con regularidad.
Antes de empezar a practicar estas posturas de yoga...
- Siéntate en una posición agradable, con la espalda erguida, o bien túmbate si lo prefieres.
- Relaja el cuerpo, relaja la mandíbula separando un poco los dientes, y sonríe. Siente como al sonreír el resto del cuerpo también empieza a relajarse y te invade una ola de paz y bienestar.
- Respira larga y profundamente 7 veces y luego lleva la sonrisa hasta el corazón. Respira 7 veces más y luego esparce con la conciencia tu radiante sonrisa por cada célula de tu cuerpo.