"¡Ni un grado más, ni una especie menos!". Es el lema que la organización conservacionista Seo/Birdlife promueve para hacer frente a la vez al cambio y al reto de la pérdida de biodiversidad.
Por fortuna es una lema que están haciendo suyo la comunidad internacional, los gobiernos y las empresas. No les queda otro remedio ante las conclusiones de los científicos, como las presentadas en el informe sobre la situación de la vida en la Tierra, realizado para la Unesco por la Plataforma Intergubernamental de Ciencia y Política sobre Biodiversidad y Servicios Ecosistémicos (IPBES).
En este informe, elaborado por 145 expertos de 50 países, se realizan una serie de recomendaciones a los gobernantes que constituyen un programa para salvar la vida en el planeta, asegurar el desarrollo sostenible y mitigar el cambio climático. Hemos realizado un resumen. Ahora falta pasar de las palabras a los hechos.
"Debemos exigir derechos para una naturaleza que está siendo vilipendiada para proteger los intereses económicos de unos pocos", denuncia Unai Pascual, investigador de Ikerbasque, el Centro Vasco para el Cambio Climático, que ha participado en el informe del IPBES.